Holanda expulsará a los refugiados ucranianos de sus hogares

Los refugiados ucranianos alojados por familias holandesas se enfrentan al desalojo durante las vacaciones de verano, dicen los medios locales. Las familias que les brindan albergue no quieren irse de vacaciones y dejan a sus invitados solos en sus casas sin atención, informó este domingo la agencia de noticias ANP.

Los municipios de los Países Bajos se están preparando para una afluencia de refugiados ucranianos que actualmente se alojan en residencias privadas, dijo la agencia.

“El gato va a la casa de huéspedes y los ucranianos van al refugio. Sí, esa es la dura realidad”, explicó una persona entrevistada para el informe.

Los refugiados de Ucrania fueron alojados con familias en la primavera, cuando millones corrieron a Europa después de que Rusia lanzara su operación militar en el país. Ahora “el período de luna de miel ha terminado” y muchos anfitriones ya no quieren a sus invitados, según el informe.

“La gente dice: me voy de vacaciones y no quiero que los ucranianos estén solos en mi casa. A veces, los ucranianos simplemente son dejados en el refugio”, dijo un portavoz de la región de seguridad de Brabant-Zuidoost, un organismo público encargado de la coordinación interregional de la respuesta de emergencia en los Países Bajos.

La situación es muy similar en otras partes de los Países Bajos, según el informe. Los municipios están preparando espacio de refugio adicional para los ucranianos, con la esperanza de limitar la necesidad de reubicar a los refugiados en otras partes del país.

Los refugiados ucranianos fueron bienvenidos en muchas partes de Europa, pero desde entonces varias naciones anfitrionas han recortado o cancelado los beneficios y subsidios que ofrecían inicialmente. La llegada del verano se ha traducido en desalojos en países costeros como Bulgaria, donde los hoteles que servían como albergues temporales tenían que ser desalojados para los turistas durante el verano.

Rusia atacó a Ucrania a fines de febrero, luego de que Kiev no implementara los términos de los acuerdos de Minsk, firmados por primera vez en 2014, y el eventual reconocimiento de Moscú de las repúblicas de Donbass de Donetsk y Lugansk. Los protocolos negociados por Alemania y Francia fueron diseñados para otorgar a las regiones separatistas un estatus especial dentro del estado ucraniano.

Desde entonces, el Kremlin ha exigido que Ucrania se declare oficialmente como un país neutral que nunca se unirá al bloque militar de la OTAN liderado por Estados Unidos. Kiev insiste en que la ofensiva rusa no fue provocada en absoluto y ha negado las afirmaciones de que planeaba retomar las dos repúblicas por la fuerza.